Les proponemos un sendero por los alrededores de Aracena que reúne lo más destacado de la naturaleza de nuestra Sierra. El entorno que rodea Aracena es un claro ejemplo de la fusión de ecosistemas de la que puede presumir el Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche. El monte mediterráneo original cedió, siglos atrás, parte de su territorio a otras especies introducidas por el ser humano, hoy indispensables en nuestro día a día: como el castaño, protagonista de esta ruta.

A un kilómetro aproximadamente tomamos un desvío a la derecha (perfectamente señalizado) para cruzar un tramo recuperado por el Ayuntamiento de Aracena en medio de una zona de dehesa con espectaculares alcornoques y una profusa vegetación. Este tramo –un poco estrecho en algunos pasos– discurre entre fincas privadas, por lo que debemos ser respetuosos a nuestro paso.

Más adelante, conectamos con una pista de mayores dimensiones e iniciamos una subida constante hasta conectar con el camino de Aracena a Linares, que tomaremos a la derecha. En esta cuesta hormigonada, encontraremos una zona de recreo habilitada con mesas y bancos de material que ofrecen un rincón idílico al visitante para el descanso bajo la sombra de encinas centenarias incluso para jugar una partida en los tableros que incorporan las citadas mesas.

Como decíamos, al conectar con el Camino de Linares giramos a la derecha y regresamos a Aracena. Este sendero es uno de los históricos de la Sierra de Aracena, insertado en plena dehesa de encinares y alcornocales y con mucha vegetación y un espacio ideal para las huertas -algunas de ellas un verdadero espectáculo visual en verano–, que hace tremendamente agradable el recorrido.

A Aracena llegamos y encontramos una construcción en hormigón inconclusa. Giramos a la izquierda, hacia la rotonda –dejamos a la izquierda la barriada Aracenilla, con casas señoriales diseñadas por Aníbal González– y tomamos la calle Sierra de Aracena hacia arriba. A unos 150 metros, a la izquierda, comienza la segunda parte de nuestro camino: por la Sierra de San Ginés.

Esta cima es una de las que rodean al pueblo de Aracena. El sendero –perfectamente señalizado– comienza con una importante pendiente que nos ofrece unas destacadas vistas del pueblo a medida que vamos ascendiendo. Aquí, la vegetación mediterránea ha conformado un tupido pasillo de gran ayuda en época estival.

Tras superar este primer tramo de subida, avanzamos en paralelo por la falda de la montaña e iniciamos otra nueva subida por un camino tortuoso y en constante ascenso que nos llevará hasta la cima del sendero –que no de la Sierra de San Ginés, que está dentro de una propiedad privada y no podemos acceder a ella sin permiso–. Una vez aquí, discurriremos entre paredes de piedra por un espectacular castañar con ejemplares centenarios pero, ojo, propiedad privada.

La recogida de castañas está totalmente prohibida así como el acceso a estas fincas sin permiso por parte de sus propietarios. Este hecho está tipificado como delito por las Autoridades y debe ser tenido muy en cuenta. Si queremos castañas, las podemos comprar en cualquier punto de venta de nuestros pueblos.

Este tramo del sendero nos permite conocer mejor el ecosistema del castañar de la Sierra de Aracena, un cultivo introducido durante la Repoblación de este territorio (siglo XIII) por gallegos y leoneses y que perdura hasta el punto de ser un símbolo de este Parque Natural.

Una vez terminamos el descenso de la Sierra de San Ginés nos encontramos con la carretera Nacional 433, que corta la Sierra de Aracena de este a oeste y que cruzaremos para continuar por el lado izquierdo de la vía. Aquí tenemos un punto de especial riesgo en materia de seguridad por lo que es importante llevar en nuestra mochila un chaleco reflectante homologado para el tramo de unos 400 metros que debemos hacer hacia la derecha (dirección Aracena) por el arcén.

A esa distancia se encuentra un hito que señala de nuevo el camino hacia la izquierda. Nos sumergimos de nuevo por un espacio de castañar en fincas particulares que nos permite disfrutar del encanto de estos árboles en cualquier época del año (aunque la más espectacular es el otoño). Seguimos por el sendero y nos encontraremos con el tramo que va de Aracena a Los Marines. Giramos a la derecha y continuamos rumbo a Aracena, a la que llegaremos tras subir una importante cuesta final al Polígono Industrial Cantalgallo.

Ficha Técnica 

Trayecto: Circular

Duración: 90 minutos

Dificultad: media

Distancia: 8 kilómetros

(Puedes descargar Ficheros GPS, perfil y mapa en wikiloc.com)